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¿Por qué ahora apenas se usa el gotelé?
3 de diciembre de 2015

Hoy nos gustaría aprovechar nuestra amplia trayectoria como pintores profesionales en Burgos para hablarte de una técnica pictórica de interiores que si bien a finales de los años 70 y durante la década de los 80 causó furor en todos los hogares, hoy apenas se utiliza. Nos estamos refiriendo al gotelé y en este post te vamos a contar algunos de los motivos que han hecho que ya no esté de moda.

El gotelé es una técnica de pintura de interiores que consiste en aplicar pintura al temple más espesa y grumosa de tal forma que al proyectarla sobre la pared, se produce un efecto visual que simula la presencia de gotas voluminosas e irregulares, dando lugar a una superficie rugosa que aporta relieve y funciona como un elemento decorativo. En la mayoría de los casos, las gotas aplicadas son del mismo color que el que tiene la pared de fondo.

Como te decíamos, esta técnica triunfó en la década de los 80 debido fundamentalmente a dos factores: era la mejor forma de disimular las imperfecciones de la pared y ayudaba a que la pintura se conservara en perfectas condiciones durante más tiempo. El gotelé era una forma de decorar las paredes y hacer que parecieran más limpias que si se pintaban lisas, donde en seguida se notarían los roces y las manchas, obligando a pintar cada menos tiempo.

Sin embargo, el paso del tiempo fue imponiendo estéticas más sencillas y minimalistas en las que el gotelé no tenía cabida. Como expertos pintores profesionales en Burgos sabemos que además, la aparición de numerosas técnicas para mejorar el estado de la pared y disimular sus imperfecciones vino a consolidar el fin de una pintura decorativa con la que crecimos muchos de nosotros.

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